Si estás a punto de finalizar tu recorrido académico, ya sea en pregrado, licenciatura o doctorado, es esencial que tengas en claro el camino a seguir para abordar la elaboración de tu Trabajo de Fin de Grado (TFG). En este artículo, te ofreceremos una guía completa de pasos a seguir para aprender cómo confeccionar un TFG, desde la definición de tu tema hasta la culminación de tu proyecto académico.
CONCEPTO DE UN TFG UNIVERSITARIO
El TFG, en calidad de trabajo académico, se posiciona como un proyecto de investigación que somete a cada estudiante a un riguroso proceso de indagación y análisis. En su esencia, cada TFG gira en torno a un tema específico que se encuentra dentro de la disciplina académica del estudiante.
Una de sus características más destacadas es que, a lo largo de su desarrollo, se espera que el estudiante genere nuevo conocimiento en relación con un tema previamente conocido o poco explorado. Por lo general, la extensión de un TFG ronda las 100 páginas. Su principal objetivo es plantear una problemática que requiere una respuesta a través de la investigación. Para lograrlo, el estudiante debe utilizar esta información para exponer sus ideas y reflexiones mediante un análisis minucioso y una profunda reflexión sobre el problema abordado en su TFG.
¿CÓMO EMPEZAR LA ELABORACIÓN DE UN TFG?
El primer paso que debes dar como estudiante es definir un tema de estudio para tu proyecto de investigación, es decir, tu TFG. A menudo, este proceso se lleva a cabo en colaboración con un profesor o tutor de TFG, pero elegir un tema adecuado no es una tarea sencilla. En este sentido, te recomendamos que selecciones un tema que te apasione y que, al mismo tiempo, sea manejable.
Cuando decimos «manejable», nos referimos a la importancia de concebir una hipótesis que permita un enfoque viable dentro de tus recursos y habilidades de investigación. Para lograrlo, puedes tomar un tema particular y relacionarlo con tu entorno cotidiano.
Supongamos que tu TFG se enfoca en el ámbito de la educación. Lo primero que deberías hacer es afinar aún más la temática. Un consejo valioso es plantear tu tema de estudio en forma de pregunta.
Por ejemplo: «¿Cómo ha afectado el proceso de aprendizaje de los niños de 4 a 7 años durante el período de confinamiento más estricto?»
También podrías restringir aún más tu tema al hacer referencia a una institución educativa en particular que se encuentre cerca de tu lugar de residencia. Esto facilitaría la recopilación de datos altamente relevantes para el inicio de tu investigación. Además, al delimitar la muestra de población (niños de 4 a 7 años), podrás recopilar bibliografía de otros autores que hayan teorizado sobre el aprendizaje en la educación primaria.
¿CÓMO ORGANIZAR TU TFG TENIENDO EN CUENTA SU FORMATO?
Una vez que hayas definido tu objeto de estudio, al que llamaremos hipótesis, debes comenzar a recopilar fuentes bibliográficas. En ciertos casos, dependiendo de tu disciplina, también deberás llevar a cabo investigaciones de campo, como observaciones o entrevistas.
Cuando llegue el momento de redactar tu proyecto, es fundamental que sigas una estructura específica. Las secciones típicas de un TFG incluyen:
- Portada: La portada es la primera página del TFG y debe contener información esencial, como el título del TFG, tu nombre, los detalles de tu carrera y universidad, tus datos personales y la información de tu tutor o profesor.
- Resumen: El resumen es una sección en la que debes sintetizar la motivación de tu TFG, el planteamiento del problema, la metodología empleada, los resultados y las conclusiones. Debe ser breve y atractivo para captar la atención de los lectores desde el principio.
- Índice: El índice es una tabla de contenidos que enumera todos los capítulos y secciones del TFG junto con sus números de página. Puedes crear un índice automático utilizando herramientas como Word.
- Introducción: En la introducción, debes presentar la problemática que abordarás en tu TFG, los antecedentes, la importancia de tu investigación y una breve descripción de los hallazgos más relevantes. Marco
- Marco teórico: En esta sección, debes reunir información relevante para tu investigación, citando adecuadamente las fuentes y organizando los conceptos según su relevancia en tu trabajo. También debes conectar estos conceptos con tu experiencia a lo largo de tu proceso de acercamiento a la problemática de estudio.
- Metodología: Respecto a la metodología, en esta sección debes justificar los métodos utilizados para la recopilación de datos en tu investigación. Además, puedes explicar los recursos empleados para analizar los datos obtenidos y llegar a tus resultados o conclusiones.
- Resultados: En esta sección, presentas los resultados de tu investigación y los relacionas con la hipótesis que planteaste.
- Conclusiones: Las conclusiones representan una reflexión sobre todo el proceso de tu investigación. Deben ser claras y concisas, resaltando cómo tus hallazgos responden a la hipótesis.
- Bibliografía: Aquí debes listar todas las fuentes consultadas durante tu investigación y citarlas de acuerdo a las normas de tu carrera o universidad, como las normas APA. Apéndices o anexos: Los apéndices son el espacio para incluir materiales adicionales, como documentos de entrevistas, cuestionarios, gráficos e imágenes, entre otros.
CONCLUSIONES FINALES
Como has observado a lo largo de este artículo, la elaboración de un TFG requiere un proceso metódico que debe seguir un orden específico, desde la elección del tema hasta la redacción final. También es fundamental comprender las secciones habituales de un TFG y qué contenido debe incorporarse en cada una de ellas.
Si te encuentras en el proceso de confección de tu TFG y necesitas apoyo, recuerda que en Encarga tu TFG estamos aquí para ayudarte. Contamos con un equipo de expertos en diversas áreas académicas que pueden colaborar contigo para que tu proyecto sea un éxito. No dudes en ponerte en contacto con nosotros para solicitar un presupuesto.